viernes, 15 de mayo de 2009

AVE VERUM

AVE VERUM
Ave Verum, luciérnaga encendida,
que silenció la noche en un suspiro,
y arropada con orlas de zafiro,
buscó la plenitud que da la vida,
¿dónde de ayer y gracia concebida
fuiste la mariposa de mis credos,
el ángelus que esconden mis hayedos,
o el largo azul de la mañana oscura?
Ave Verum, ceñida a mi cintura,
rosa inmortal, y estrella entre mis dedos.

1 comentario:

Almaticamente dijo...

Ya te dije que es la décima más bella y emotiva que he leído jamás.
Adivina, adivinanza...

Escuchemos a duo el Ave verum y el Requiem.